Lavar las semillas para quitar el polvo que puedan tener.
Escurrirlas bien para eliminar el agua.
En una sartén, colocamos las semillas y sin parar de remover para que no se quemen, esperamos a que se sequen y se tuesten ligeramente. No hace falta que esperemos a que se vean tostadas, sólo es necesario que se sequen completamente.
Comenzarás a ver cómo se inflan algunas de ellas, sobre todo las de calabaza y las de sésamo.
Colócalas en un procesador de alimentos cuando se hayan enfriado un poco y tritura poco a poco de cada vez.
Para que las semillas no se calienten demasiado ni salga el aceite y se haga pegotes, es mejor que dejes reposar y enfriar las semillas entre una vez y otra que tritures los ingredientes.
Al final, y si hemos sido pacientes, el resultado debería ser una crema suave, homogénea y perfecta para tostadas
Recipe by Nutrición Esencial at https://www.nutricionesencial.es/2015/10/mantequilla-de-semillas.html/